Pasó el siguiente…. Y también se le ganó. El Power Electronics Valencia experimentó en sus carnes la medicina isleña cayendo derrotado en un vibrante e intenso partido ante el Gran Canaria 2014 por un ajustado marcador de 68-66.
Victoria vigésima de los amarillo que les aúpa hasta la quinta plaza de la clasificación y a falta de una jornada (Granada) para dar el cerrojazo a la fase regular. Alegría por el triunfo y por el objetivo alcanzado por el equipo del que volvieron a disfrutar los seguidores amarillos, que llevaron a su equipo en volandas sobre todo en los momentos complicados.
Los dos mejores conjuntos de los últimos dos meses se retaron en el pabellón de la Avenida Marítima. Sus números les avalan y no eran para menos. Nueve triunfos en los últimos diez partidos, casi nada. Premisa capital desde el banquillo. No dar ventaja, ni facilidades en ningún momento al rival que se tenía enfrente. Y para ello, los jugadores amarillos tomaron la iniciativa en el electrónico con el acierto de Wallace, Jim Morán y Carroll en el primer acto. Por parte visitante la puntería de Víctor Claver mantenía a su equipo por debajo de los diez puntos al final del cuarto, 24-16.
Jim Morán se dispone a dejar un balón a aro pasado./CBCG |
El repertorio no iba a cambiar en ninguno de los dos bandos. Las defensas siempre estuvieron por encima de los ataques, Carroll, no terminó de ver el aron visitantes con claridad. Le costó muchísimo salir del marcaje de Rafa Martínez, que lo tuvo atado en corto. Y el empeño del escolta grancanario, le llevó a malas selecciones de tiros. Despertó el conjunto taronja para ponerse por delante en el electrónico con un lanzamiento de Martínez 39-40, después de cuatro canastas de tres puntos consecutivos, con Cook como protagonista.
Pese a ello, y con el intercambio de canastas. Los jugadores locales, Spencer Nelson y Xavi Rey siguían ‘fajándose’ con los pivots rivales. No se le podía pedir más a los amarillos ante un equipo, el valenciano, que no aceptó el guión que estaba padeciendo en el parqué del CID. Con todo por decidir en la última entrega por parte de los dos equipos, el ambiente subió de temperatura en el electrónico y en la pista, con Cook y Bellas como protagonistas.
Un cuarto final, donde los amarillos disputaron cada punto como si fuera el último del partido. Javier Beiran no quiso pasar desapercibido, y se unió a la fiesta con dos acciones individuales que le volvía a dar la delantera al Granca, 57-56. Ya no había marcha atrás, todo estaba por decidir y el aire se podía cortar en el CID. A falta de 4 minutos para la conclusión del partido, el equipo de Pedro Martínez volvía a coger oxigeno, 63-56.
La comunión equipo-afición es perfecta./CBGC |